| [ | GRETA | ARCILA |
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| FOTOS: HÉCTOR VELASCO FACIO | |||
Finalista en la
pasada
entrega de los XVI Premios
Obras CEMEX en el rubro
de Diseño de Conjunto
Habitacional Niveles
Medio y Alto, y Acreedor a
una Mención de Honor en
la Novena Bienal de Arquitectura
Mexicana, el edificio
en Tamarindos 29 da
certeza al despacho
Garduño Arquitectos
de que el camino emprendido
va por la ruta correcta.
J
uan Garduño es un arquitecto al que le gustan los
retos, y el caso de la obra que ahora nos atañe no es la excepción.
Tamarindos 29 —en Bosque de las Lomas— desde su concepción
surge como un proyecto innovador en todos los sentidos, ya que lo que
Garduño Arquitectos
y lo invité
a participar; tuvimos una comida los tres y de ahí surgió
la idea del edificio”, comenta el líder del proyecto.
El planteamiento por parte del cliente era simple y complejo a la vez ya que se necesitaba usar el 100% del área de desplante permitida para satisfacer el objetivo económico y comercial. Lo que el cliente tenía era un terreno muy caro, ubicado en un mercado en donde los departamentos regulares tienen un metraje aproximado entre 200 y 250 metros cuadrados; incluso en la misma calle existen departamentos de 180 a 200 m2. Y justo ahí nació la idea del arquitecto: “Propuse hacer unas ‘casas en el aire’ —incluso así le llamamos al proyecto. Quería hacer departamentos con todas las características de una casa. Esto con el fin de no competir con el mercado inmobiliario de la zona y dar algo más a la
El planteamiento por parte del cliente era simple y complejo a la vez ya que se necesitaba usar el 100% del área de desplante permitida para satisfacer el objetivo económico y comercial. Lo que el cliente tenía era un terreno muy caro, ubicado en un mercado en donde los departamentos regulares tienen un metraje aproximado entre 200 y 250 metros cuadrados; incluso en la misma calle existen departamentos de 180 a 200 m2. Y justo ahí nació la idea del arquitecto: “Propuse hacer unas ‘casas en el aire’ —incluso así le llamamos al proyecto. Quería hacer departamentos con todas las características de una casa. Esto con el fin de no competir con el mercado inmobiliario de la zona y dar algo más a la
visualizó desde
un inicio fue hacer casas flotantes en un edificio; ¿Difícil?,
desde luego, ¿Imposible?, nada que un buen programa arquitectónico
no pueda lograr cuando se tiene bien claro lo que se busca. “La
historia de este proyecto es muy sencilla, llegó a mis manos gracias
a que un conocido mío tenía un terreno y quería hacer
un negocio inmobiliario; así, me contactó; yo conocía
a un desarrollador (Baita)
Construcción y Tecnología®
Febrero 2007