EN LA PRIMERA parte de este escrito inicialmente se estudiaron algunas medidas prácticas a prever; para evitar los inconve- nientes relacionados con la base de apoyo de los pisos industriales de concreto (PIC). Después de la apropiada selección del ma- terial para la base y su compactación, y que se verifique el cumplimiento de los estándares de calidad requeridos; la base granular de apoyo debe ser adecuadamente humedecida antes de recibir el concreto. Es recomendable saturarla un día antes del colado y volver a mojarla justo antes del colado sin que se aprecien charcos en la superficie. Estas recomendaciones deben ser especialmente tenidas en cuenta en condiciones de clima caluroso y para PIC exteriores.
Una inundación excesiva de la base también puede crear otros inconvenientes. Si bien la hu- mectación es para que la base no le ‘quite’ agua al concreto e incremente el riesgo de fisuración por contracción plástica, si la base es virtualmente impermeable o no puede absorber ninguna can- tidad de agua; puede incrementarse entonces el riesgo de otras patologías, como son los defectos superficiales y el alabeo de las losas.
La necesidad de emplear una barrera de vapor bajo el PIC, hace que normalmente se emplea una lámina de polietileno. En diferentes partes, estas láminas se emplean sin conocer las razones y, lo que es más grave aún, con el desconocimiento total de que apoyar el concreto directamente sobre una lámina plástica, incrementa el desa- rrollo de muchas patologías al quedar la base impermeabilizada. Esto trae como consecuencia que el agua de exudación tenga el único camino de migrar hacia la superficie, lo que induce a que haya una mayor magnitud y período de exudación (ocasionando un gradiente de humedad), con un mayor riesgo de fisuración por asentamiento plástico y por contracción por secado. Por otra parte, también existirán mayores variaciones dimensionales por cambios de temperatura, ma- yor intensidad en el alabeo; así como una mayor probabilidad de terminación prematura del piso y defectos superficiales asociados a mapeos, delaminaciones y ampollas.
Las diferentes recomendaciones indican que
las barreras de vapor deben emplearse cuando son
estrictamente necesarias. En este caso: cuando
pueda existir humedad bajo el piso y su terminación,
cuando el acabado superficial o revestimientos sean
susceptibles a ésta, y cuando existan equipos, maquinarias
o productos que no admitan el contacto con la
humedad, si la misma puede presentarse en la base.
Si son necesarias las barreras de vapor, se deben
apoyar las láminas de polietileno sobre una base
adecuadamente compactada, y sobre la lámina
colocar y compactar una capa de material granular.
Sobre esta capa granular adecuadamente humedecida
y compactada se deberá colar entonces el PIC.
Ante la necesidad de construir sobre un piso
existente que puede o no estar fisurado, en primer
lugar debe estudiarse y relevarse el piso y el tipo
de espaciamiento de juntas y fisuras que existan.
En función de lo anterior se deberán tener en
cuenta los siguientes aspectos:
• Si el diseño de juntas es adecuado, y se presenta
con espaciamiento coherente (en donde no hay
fisuras activas), las juntas del nuevo PIC coincidirán
perfectamente con las juntas del piso existente.
• Si existe un espaciamiento superior a los 4 m
ó 4.5 m, y no existen fisuras activas, es recomendable
subdividir en dos o en cuatro los tableros
existentes; ya que la adherencia con el concreto
de la base puede acarrear fisuras indeseadas.
• Si el relevamiento y posible seguimiento de
fisuras revela que pueden existir fisuras activas, es
indispensable separar el nuevo PIC del piso anterior.
Además de la posible subdivisión en tableros
de menor dimensión y que las juntas coincidan con
las existentes, la separación podría efectuarse
mediante una o dos láminas de polietileno, una
capa de membrana geotextil y/o la colocación de
una capa de material granular bien compactada.
Cuando no se dispone de espacio suficiente por
los niveles del nuevo PIC, una buena solución es
emplear una capa de concreto asfáltico, que si
bien liga ambos pisos por su flexibilidad, también
permite el movimiento independiente de ambos.
De no tomar estas precauciones, el movimiento
de las juntas y fisuras se transmitirá o reflejará al
nuevo piso, y toda la inversión habrá sido en vano.