LOS ACTUALES pavimentos de concreto están siendo construidos más lisos que antes, proporcionando una excelente superficie para el manejo, retención de una buena textura superficial y resistencia al derrape. Por su parte, el advenimiento de la pavimentación y las guarniciones están haciendo la construcción más fácil gracias a los sistemas de guía con láser y ópticos. Las mezclas de concreto bien graduado han mostrado excelentes propiedades, tanto en estado fresco, lo que ayuda a su construcción, como en estado endurecido, que mejora la durabilidad y el desempeño. No obstante todos los avances tecnológicos, continúa siendo crítica la comprensión de los principios básicos.  El director administrativo de servicios técnicos para la American Concrete Pavement Association (APCA ) presentó un manual para la construcción básica de pavimentos de concreto con moldes fijos, por ejemplo, para caminos particulares, aceras y calles en la ciudad.
    Preparación de la sub-base
     Un pavimento hecho con concreto de calidad empieza con la preparación adecuada de la superficie del suelo existente. El suelo debe ser apropiadamente compactado y nivelado a la elevación correcta para el proyecto. Dependiendo de varios factores, se podría colocar una capa de material de base encima de la sub-base.
     “El tipo del suelo en la sub-base afecta realmente el diseño del pavimento,” dice el director de la APCA.  “También determina la cuestión de decidir si se va a poner o no un material de base para ayudar a acojinar la losa.

   Ciertas arcillas son muy susceptibles a los cambios de humedad, expandiéndose cuando se mojan, y contrayéndose cuando se secan. Si se tiene una capa de material entre el pavimento y la sub-base de arcilla, se ayudará a minimizar tal efecto”. Cualquier tipo de piedra graduada puede agregarse como un material de base, por ejemplo, grava de río redonda, piedra de cantera, piedra triturada, o cualquier material que pueda alcanzar la densidad apropiada con tan pocos huecos como sea posible cuando sea compactada.
     Este material, con frecuencia, necesita estar disponible localmente. No tiene que ser especialmente denso; simplemente necesita ser estable. “La mayoría de las especificaciones exigen aproximadamente un 95% de la densidad máxima del material a un contenido de agua dado”, dice el especialista. Además de lo anterior, este material debe tener suficiente estabilidad para soportar el tráfico de construcción que correrá sobre él antes de que el pavimento esté completado. Si ese es el caso, también estará bien cuando esté por debajo del concreto”.

     Algunos contratistas vuelven a trabajar sobre puntos blandos en el material de la sub-base, mezclando cal viva (cal hidratada) o ceniza volante en el material para ayudar a secarlo o para aglomerarlo. Estas dos sustancias no sólo secan los puntos blandos y lodosos, sino que también trabajan como un aglomerante similar al cemento o al asfalto, estabilizando el suelo.
     Referencia: Concrete Construction.

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Construcción y Tecnología®

Febrero 2007